La extrema derecha gana en Francia en primera vuelta con el 34% de los votos, según los sondeos al cierre de las urnas. Marine Le Pen festeja la victoria de su partido en las elecciones legislativas.


“El partido de Macron se ha quedado prácticamente afuera del Congreso” le dijo a periodistas Le Pen.
Con la inmensa mayoría de escaños por decidir, el candidato a primer ministro, Jordan Bardella, apela a la movilización masiva para obtener la mayoría absoluta en la segunda vuelta.
Reina el entusiasmo en el ala ultraderechista. La primera vuelta de estas elecciones legislativas en Francia han confirmado la victoria histórica del partido Agrupación Nacional, que por primera vez gana unas legislativas -lo había conseguido antes en unas europeas- y lo hace con el 33,2 % de los votos y como primera en 233 circunscripciones, a la espera del escrutinio completo.
La ultraderecha de Marine Le Pen consiguió su primera victoria desdiabolizada y elegida por el electorado francés, en la primera vuelta de las elecciones legislativas. Reagrupamiento Nacional, el ex Frente Nacional de su padre, Jean Marie, obtuvo el 34 por ciento de los votos, la izquierda reunida en el Nuevo Frente Popular consiguió el 28,1 por ciento y el partido presidencial quedó postergado al tercer lugar, con el 20, 2 por ciento, según las proyecciones de Elabe para BFMTV. La ultraderecha no gobierna Francia desde la Segunda Guerra Mundial. Pero esto es solo un paso.
La segunda vuelta el próximo domingo será quien decidirá si Reagrupación Nacional consigue una mayoría absoluta, que fuerza al presidente Emmanuel Macron a convocar a ellos y a Jordan Bardella como primer ministro a un gobierno de cohabitación.

El presidente Emmanuel Macron llamó a un “largo unión claramente democrática y republicana” para enfrentar al lepenismo el próximo domingo, en un comunicado.