El excantante de la Bersuit habló en Radio con Vos con Ernesto Tenembaum y repasó lo sucedido después de la charla que dio en TEA con sus frases repudiables.

Cordera, en el centro de la polémico allá por el 2013

Si bien muchos esperaban una reflexión más profunda y un pedido de disculpas a quienes se sintieron afectados por sus palabras, Gustavo Cordera encaró la charla con Ernesto Tenembaum de otra forma.

“No fue el problema el contenido de lo que dije, sino haberlo dicho. Porque el contenido está en los libros de psicología. Comencé a entender el mundo que se venía, comencé a forjarme interiormente, porque el afuera era tan hostil y tan desagradable para mí”.

“Como el afuera era tan agresivo y hostil hacia mí , no me quedó otro lugar que habitar adentro mío. Era el único lugar posible para seguir vivo. Era un lugar que venía evitando hace tiempo  En ese momento morí y volví a nacer. En el momento que me pasó eso, tuve una reencarnación. O sea, habitó un nuevo ser en mí, que tiene condimentos y tiene cosas de aquella historia, todavía por sanar y resolver. Pero empezó una nueva vida que yo agradezco, que fue redentora”, señaló en un confuso argumento puramente autorreferencial.

“Lo que expresé en ese momento lo hice desde la honestidad intelectual y honestidad interior. Yo me experimento de los errores. Toda mi vida me he equivocado, creo que el 99 por ciento de las veces, he acertado muy poco. Creo en el error como forma de evolución personal, de crecimiento personal, de enriquecimiento personal”, terminó al pretender justificar con un confuso mensaje el impacto de sus dichos sobre la violación a las mujeres.

Cultura de la Cancelación, qué es?

Es una nueva forma de escrache social que consiste en eliminar del espacio público a la persona que infringe determinado mandato social o corrección política. Ejemolo, Gustavo Cordera y sus repudiables frases.
Se denomina “cultura de la cancelación” a retirar apoyo público o financiero a aquello que vaya en contra de un precepto moral o una causa social, o que interpele a la corrección política con un dicho o una acción.

“Cancelar” es activar campañas en contra de una persona, una empresa, un producto o un grupo identificado con una actividad, como el arte o la política. El objetivo es marcar, dejar una signo de alerta en el presente y a futuro.

Las iniciativas para “cancelar” se potencian en las redes sociales a través de hashtags, fotos y videos o “escraches” que se vuelven campañas en contra de “ése” o “eso” que atenta contra ideas o instituciones. Un linchamiento virtual y público.

Cuando se trata de un delito, la cancelación es previsible e, incluso, fácil de entender. La dificultad está puesta en las zonas grises, en los discursos que ponen en cuestionamiento ideas dominantes, por ejemplo. O al revisar el pasado con parámetros del presente. O cuando ciertos colectivos ya lograron visibilidad, conquistaron derechos y quieren hacerlos valer, al punto de cambiarle la identidad a una institución.